La gran sensación de que todo está acabado y que nada más vendrá, en términos sociales, aparentemente el orden perfecto de las cosas ya está decidido, por lo que ya nada puede estar fuera de una ley universal. En consecuencia, se vive cada día en condiciones prematuras y cercanas a la inconsciencia, este es el límite al cual nos aferramos cada día al encontrarnos inmersos en el sistema. Por lo visto, a su vez, es inexorable inmiscuirse en este sistema para sobrevivir, aunque se anhele lo contrario (es como la historia que contaba el clérigo al señor K en la catedral en el libro "El Proceso" de Kafka. Un centínela ...bla bla bla) . Sin embargo, siendo fiel a mi política, existen esas personillas que cambian a las personas y por ende al mundo, ya sea con escritos, símbolos, signos o ya sea con actos concretos.
Lo trágico está en que cada día que avanza se complica aún más cambiar, modificar, motivar o inspirar a cada persona, puesto que la sociedad se vuelve cada vez más exigente, lo que conlleva muchas veces a que esos grandes seres se pierdan en la penumbra de una sociedad enajenada.
La incertidumbre de estar en este sistema es lo que muchas veces me impide escribir. Un sistema con poder inimaginable al cual nos subordinamos tanto que llegamos a perder el juicio, la razón. De ahí que existan tantas personas, que pese a no ser genios, se preocupen en tratar de cambiar la mente de las personas ¿Qué más talentoso que eso? De ahí mi respeto y admiración hacia algunos escritores, músicos y pintores que, no siendo famosos ni genios, luchan por conservar viva la ilusión de un gran cambio. No de pretender cambiar mentes a su favor, sino todo lo contrario, de cambiarlas para que puedan servirse de su propio "logos". Así, se lograría lo que tanto se anhelaba en la temática de 1984; el cambio. Un cambio que se manifiesta en la estratificación social, en donde la prole (la mayoría) pueda darse cuenta de su excesivo poder para poder vivir en igualdad de condiciones con la clase alta. Un cambio social, indudablemente requiere un cambio en todos los aspectos, de ahí que mi ejemplo tal vez no sea el más apropiado. Como sea, apoyo a los precursores del cambio, a sus seguidores y todo lo que conlleve al bien común.